Mónica dice que a algunos de sus clientes hispanos les preocupa que obtener un seguro de vida pueda desafiar el destino. Piensan que algo malo les sucederá como resultado de obtener cobertura.
“La imagen que tengo en mi cabeza es la de la parca”, se ríe. “¡Te prometo que la parca no me seguirá! Si eso realmente sucediera, las aseguradoras de vida estarían fuera del negocio”.
En general, solo una cuarta parte de los estadounidenses se sienten cómodos hablando sobre la planificación para el final de la vida, pero los hispanos informan que se sienten aún menos cómodos cuando se trata de tales conversaciones, según el mismo estudio del Barómetro.
Lo entendemos, hablar de la muerte no está en la parte superior de tu lista de tareas pendientes. Al igual que esas citas anuales con el médico o finalmente el mantenimiento del automóvil… Es más fácil posponerlo. Pero el mañana nunca está garantizado. Cuanto más familiarizado esté con el seguro de vida, más fácil será tener estas conversaciones difíciles. Para obtener más consejos sobre cómo hablar sobre el seguro de vida con tus seres queridos, consulta este artículo.
Voy a dejar esta tierra con un puñado de tierra. Más vale que “viva” todo lo que pueda. Mónica dice que muchos de sus clientes hispanos sienten que la vida se trata de vivirla al máximo. “Es muy cultural pensar en vivir el día a día. Incluso en las canciones españolas, hay un tema común de ‘solo te vas a llevar tierra contigo cuando mueras’, así que es mejor vivir mientras puedas”. Ella dice que esto contribuye a una cultura de vivir de cheque en cheque.